Y LLOVIERON PÁJAROS
Jocelyne Saucier
“Ser libre de morir o de vivir, no hay nada mejor para elegir la vida”
La autora es canadiense, y el libro se publicó en francés en el año 2011 y ganó varios premios: el Rinquet (que otorga la Academia de las Letras de Quebec), el Premio Literario de los Estudiantes, el premio de los lectores CQB, el premio Francia-Quebec y el Premio de los Cinco Continentes de la Francofonía. Este último se creó en 2001 para recompensar la novela de un escritor que refleje una experiencia cultural que enriquezca la lengua francesa.
En el 2018 se publicó en español, con traducción de Luisa Lucruix Venegas. Se ha traducido ya a 13 idiomas y está por estrenarse en el cine.

El libro tiene como trasfondo unos incendios que asolaron a Canadá a principios del siglo XX (de ahí el nombre: el fuego absorbía todo el oxígeno y las aves que iban volando, caían muertos en el bosque). Hay un sobreviviente de estos incendios de los que una fotógrafa ha escuchado hablar una y otra vez (está haciendo un trabajo fotografiando a los sobrevivientes de los grandes incendios que aún quedan vivos). Y buscando a este señor, llega a un lugar muy alejado de la civilización, en lo profundo del bosque. Ahí tres hombres viven según sus propias reglas. Un trampero que siempre ha querido vivir en la naturaleza. Un hombre que ha vivido una vida disipada y a quien una trabajadora social persigue pues quiere meterlo a un asilo para que “viva mejor” sin entender que para ese hombre eso es una sentencia de muerte…y otro hombre que ha llegado escapando de un dolor muy grande. Ahí apartados de lo que la sociedad vería en ellos (personas disminuidas, a quienes hay que cuidar y decir que deben hacer, que no podrían valerse por si mismas, como si no tuvieran encima toda una vida de experiencias) han hecho una pequeña comunidad, viven según sus reglas, sin estorbarse unos a otros, cuidándose a distancia. Los tres tienen una lata que contiene veneno. Saben que vivir en el bosque requiere fuerza y salud, y el día que no la tengan, terminarán con su vida. Saber que pueden decidir si mueren o viven, hace que disfruten cada día.

¿Pero están totalmente solos? Bueno, hay dos hombres de mediana edad que están al pendiente también de ellos (uno es gerente de un hotel a todo lujo que se construyó cuando el primer dueño encontró oro, lo hizo para otros exploradores, pero la carretera no se hizo cerca y ahora es obsoleto). Está la fotógrafa que llega a conocerlos y se encariña con el grupo. Y una mujer de 86 años que ha tenido una vida llena de dolor. Y que sin embargo, revolucionará a todo el grupo.
¿Qué me enseña?
Que siempre es posible, sin importar la edad, cambiar la manera de vivir. Aún hay mucho que hacer, enamorarse, decidir si se quiere cambiar de vida, dejar atrás lo que no convence, aprovechar los instantes de felicidad.
Que el amor siempre sana, transforma, da sentido a la vida. Que el arte permite expresar lo que a veces está atorado dentro de uno. Que la vida vivida intensamente, siempre será más satisfactoria que vivir a través de los chismes de los demás (ayyy, porque existe un personaje que ¡válgame Dios! vivió a través de otros una historia de amor).
Que así como el incendio destruye, para disfrutar la vejez es necesario desprenderse de aquello que ya se no necesita, que es una carga, que a lo mejor no quiero dejar…pero si me animo, se puede florecer de nuevo con plenitud.
Pueden leer las primeras páginas aquí. Rosa Muro tuvo a la autora de visita en su stand en la FIL 2018, y ahí tuvimos varias amigas y yo el placer de conocerla. La autora amabilísima, hablaba un español perfecto porque su primer marido fue peruano. Aquí pueden ver una entrevista con ella durante la FIL.
Aquí otro libro con protaganista de la tercera edad.
Pues no conocía esta lectura. Y me ha gustado lo que cuentas. Tomo buena nota.
Besotes!!!
Margari:
ojalá te decidas a leerlo ¡es precioso!
un beso,
Ale.